Recuperamos el 1° de mayo en la lucha sin claudicación contra el Capital
Nuevamente reivindicamos el Primero de Mayo como el día internacional de reafirmación de la lucha de las trabajadoras y los trabajadores contra la explotación capitalista y el saqueo de los bienes comunes.
En pleno siglo XXI, se profundizan los conflictos sociales en el mundo, con más explotación, hambre y exclusión social, las guerras y la destrucción del medio ambiente. Crece el nivel de explotación de las y los trabajadores, a la vez que aumentan las ganancias de las corporaciones y grandes empresas, a través de un poder económico y político cada vez más concentrado en pocas manos.
Todas las riquezas materiales y espirituales son producidas por las y los trabajadores. Es con nuestro esfuerzo que se construyen las viviendas, se produce la energía, se elaboran los medicamentos, nuestra indumentaria, los alimentos, los transportes, las nuevas tecnologías y también se produce la cultura. En síntesis, mientras la producción es cada vez más social, es apropiada cada vez por pocas manos.
Argentina no escapa a este escenario de dominación capitalista. La crisis que vivimos, con la cada vez mayor disminución de la capacidad de compra de los salarios, las jubilaciones o los planes sociales, se agrava con la inflación, que sólo puede ser generada por los sectores que detentan el poder económico, las grandes empresas transnacionales, los grandes capitalistas, con el aval de un gobierno que se presenta incapaz de enfrentarlos y tomar medidas a favor del pueblo, pero desarrolla toda su política subordinado al acuerdo de pago de la deuda con el FMI; que hace la vista gorda frente a la fuga de capitales y se arrodilla frente a las presiones y demandas de los sectores más concentrados de la economía. El resultado sigue siendo la consolidación de un modelo productivo y de desarrollo dependiente, sustentado en el agro negocio y la megaminería de exportación de nuestros bienes comunes.
Transcurridos 40 años de gobiernos constitucionales la deuda sigue siendo el condicionante para las decisiones políticas en Argentina. El resultado es llevar a los sectores populares a niveles de sobrevivencia, con trabajadores precarizados y con el hambre que se extiende en cada vez más amplias franjas de la población, con pobreza y exclusión social.
Es necesaria la suspensión de los pagos al FMI, realizar una auditoría con participación popular; y así utilizar los recursos del trabajo de nuestro pueblo para resolver las necesidades inmediatas y urgentes y no para enriquecer a los explotadores y especuladores.
Desde la Corriente Política de Izquierda sostenemos que ello se puede lograr con el pueblo movilizado en todo el país, que aglutine a la gran diversidad de organizaciones populares, sociales, sindicales y políticas y en el marco de la construcción de una alternativa política para un proyecto emancipador. Con un programa básico que reivindique paritarias libres, sin techo, un salario mínimo y por encima de la Canasta Básica Total; con jubilaciones que respondan a la Canasta Básica de los jubilados; con la creación de trabajo genuino para los trabajadores precarizados y/o desocupados.
Pero también avanzar con las propuestas populares hacia la Soberanía Energética, que reconoce a la energía como un derecho y no una mercancía; por la Soberanía Alimentaria y la implementación de políticas territoriales que favorezcan la producción comunitaria de alimentos; por la defensa del Hábitat y la Autogestión en la construcción de viviendas populares; contra la explotación indiscriminada de nuestros bienes comunes y el rechazo a los proyectos y la explotación de la megaminería a cielo abierto, que impactan en escasez de agua, contaminación de suelos, aire y ríos, enfermedades, destrucción de hábitats naturales, inhibición de actividades económicas alternativas, desplazamientos de población, endeudamiento y pérdida de la soberanía; apoyo a las políticas de igualdad de género y de lucha contra el patriarcado.
En síntesis, en este 1ro de Mayo, para resistir y avanzar frente a la dramática situación que estamos viviendo, unir al pueblo frente a la resignación del sálvese quien pueda, reafirmarnos en nuestras mejores tradiciones históricas de luchas de nuestro pueblo. Unidad de los sectores que provienen de diversas vertientes políticas anticapitalistas, antiimperialistas, antipatriarcales, para construir la herramienta política alternativa que la Argentina necesita.
Constituir una fuerza política, social y cultural que libre estas batallas, expresa la convicción y el compromiso de la Corriente Política de Izquierda.
¡Vivan las luchas de las y los Trabajadores de Todo el Mundo!
¡Viva el día Internacional de las y los trabajadores!
En CABA, convocamos a la ASAMBLEA a desarrollarse el 30 de abril en la Plaza 1ro de Mayo, Hipólito Irigoyen 2200.
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